Este escalofrío constante,
este querer irme de todos lados
a los dos minutos de haber llegado,
ese temblor que me echa antes
de que haya podido acomodarme.
Ya no quiero responder más a las palabras,
sólo mandarme a dormir un rato.
y es muy temprano todavía,
muy temprano,
pero qué tarde se siente
en todos los huesos que llevo,
qué tarde que resuena
ese aparato dentro mío,
eso que tengo por corazón.
qué tarde que llegan
los impulsos a los be(r)sos,
qué oxidada alma
si es que algo así tengo.
Ya no sé qué hacer... te lo digo en serio
y no paro de hablar sin estar diciendo nada,
como si estas palabras me llevaran a algun lado!
como si
conjugando un par de letras, realmente invocara lo deseado.
Cuánto palabrerío puede engendrar una boca marchita.
qué tan frío puede mantenerse el cuerpo, en un intento de conservación.
Lo sé, es un locura pero el cuerpo me tiembla y tengo miedo. sí, lo tengo.